Habitada desde la época celta y en otro tiempo parte del Imperio Romano, fue documentada por primera vez en el siglo IX con el nombre latino de Villa Cuchema, lo que demuestra lo profundas que son las raíces históricas de esta ciudad. Cochem también fue en su día una finca imperial y en una ocasión fue asediada y ocupada por los franceses. El rey Luis XIV quemó el castillo original y conquistó la ciudad, lo que dio lugar a una larga reconstrucción posterior. El ejército de Napoleón también ocupó la ciudad en el siglo XVIII, pero después fue asignada al dominio prusiano con la caída de Napoleón. La II Guerra Mundial también dejó su huella aquí, con la mayor parte de la ciudad destruida, debido a sus subcampos del campo de concentración de Natzweiler. Tras la guerra, Cochem fue reasignada al recién fundado Estado alemán de Renania-Palatinado. Maravíllate ante la Iglesia de San Martín, uno de los monumentos emblemáticos de la ciudad, y descubre el Monasterio de los Capuchinos, fundado en 1623 por el Elector Lothar von Metternich. Explora la Plaza del Mercado y su importancia en la Baja Edad Media, con vistas a las encantadoras casas de entramado de madera de la ciudad. Descubre el castillo de Reichsburg, un castillo medieval bellamente restaurado, uno de los castillos de colina más altos del río Mosela. ¡Cochem es una joya del Mosela con mucho más que ofrecer!